Qué ver en Roma? 15 actividades imprescindibles que hacer en Roma.

Qué ver en Roma Colosseo

No sólo hay que ver a Roma como la capital de Italia sino que más importante aún, fue la capital de un inmenso imperio. Imperio que dominó gran parte del mundo, logró mezclar diferentes civilizaciones, y con ello diferentes culturas, tradiciones, historias y artes. Una ciudad que marcó el destino de muchas otras, que dominó durante siglos, y con su caída marcó el fin de la eras. Así de importante fue Roma, la ciudad eterna!

Sin dudas, Roma es una de esas ciudades que debería estar en el top 10 de lugares para viajar. Es una ciudad que se podría considerar como un museo al aire libre. En cada esquina, en cada rincón encontrarás lugares que ver con gran historia y belleza. Iglesias, palacios, monumentos, plazas, fuentes y más tiene para ofrecer Roma. Pero no sólo eso, muchas actividades son gratis, la comida es deliciosa y no es una ciudad cara.

Son tantas las cosas que hacer y lugares que ver en Roma que en este artículo solo me he centrado en los imprescindibles de Roma, sin incluir el Estado del Vaticano. Entonces, para ayudarte en la organización de tu viaje a roma y para que puedas relajarte y disfrutar de la ciudad, sobre todo si es tu primera vez en Roma, a continuación te dejo 15 actividades imprescindibles.

1. Qué ver en Roma: El Coliseo Romano. 

Qué ver en Roma

Si hay una imagen por lo que se reconoce la ciudad de Roma es por el Coliseo Romano. Este enorme anfiteatro es uno de los primero lugares que ver en Roma. El anfiteatro fue declarado en 1980 Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y en el año 2007, también fue elegido como una de la siete maravillas del mundo moderno.

Historia del Coliseo.

El Coliseo romano, o en italiano Il Colosseo, en realidad se llama Anfiteatro Flavio, en referencia a la Dinastía de emperadores Flavia quienes fueron los promotores de su construcción. Sin embargo, el nombre por el que mayormente se conoce, se debe a una gran estatua ubicada muy cerca del coliseo, el Coloso de Nerón.

El Coliseo comenzó a construirse en el Año 71 D.C. por decisión de emperador Vespasiano tras el incendio de un antiguo anfiteatro en ese lugar. Sin embargo, fue el Emperador Tito quien lo inauguró en el año 80 D.C. con una serie de 100 días de festejos. Aún así, fue el emperador Domiciano quien logró finalizarlo en el año 82 D.C. luego de agregarle el último nivel.

El Anfiteatro se usó durante casi 500 años para diferentes espectáculos. Caza de animales, ejecuciones públicas, recreaciones de famosas batallas e incluso, al principio, batallas navales. También se realizaban obras de teatro basadas en la mitología pero lo que más se disfrutaba eran las peleas de gladiadores. La última pelea de gladiadores de la historia se registró cerca del 435. Sin embargo, la caza de animales continuó por lo menos hasta el año 523. 

El edificio se dejó de utilizar para entretenimiento en la Alta Edad Media. Luego de de utilizarse como anfiteatro, el coliseo sirvió como refugio de personas, fábrica, mercados e incluso una fortaleza. Sin embargo, luego de sufrir cuatro terremotos, se convirtió en la cantera para la construcción de otros edificios.

Qué ver en Roma

Si no fuera porque el coliseo se transformó en santuario en honor a los cautivos martirizados durante los primeros años del cristianismo, hoy no quedaría nada del enorme edificio. La construcción de una iglesia y capillas en la arena del coliseo contribuyó a detener su desarme y a que se conservara.

Estructura.

El coliseo tiene forma ovalada y mide 189 metros de largo por 156 de ancho, y alcanza los 57 metros de altura. En particular, la arena donde luchaban los gladiadores mide 75 metros de largo por 44 metros de ancho.

Respecto a su altura, el coliseo cuenta con cuatro niveles a los que se accedía a través de escaleras y galerías. En su interior, las gradas estaban diferenciadas de acuerdo a los diferentes niveles sociales. En el primer piso, en el podium se ubicaban los senadores, magistrados y sacerdotes. El segundo piso reservado para los aristócratas que no pertenecían al senado en el maenianum primum. El tercero se encontraba el maenianum secundum, para los ciudadanos ricos, y el summum para los pobres. Por último, en el cuarto nivel, ya con gradas de madera, no de mármol travertino o piedra como los anteriores, se encontraba el maenianum summum in ligneis reservado para mujeres pobres.

El coliseo tenía un techo retráctil donde una serie de telas desplegable accionada mediante poleas cubría el edificio protegiendo tanto a los espectadores como a los gladiadores del sol y la lluvia.

Entonces, puede decirse que el Coliseo Romano fue un primero modelo de edificación para los grandes estadios modernos de hoy. Con una capacidad de más de 50.000 espectadores, «Il Colosseo» fue el anfiteatro más grande construido durante el Imperio Romano

Si quieres conocer más, también puedes leer el artículo «Coliseo Romano: Diez datos llamativos del ícono italiano».

Visitar el Coliseo Romano.

Si quieres visitar el Coliseo Romano es mejor que te anticipes y compres de antemano tu entrada ya que siempre es una de las atracciones más visitadas y congestionadas de Roma. De hecho, más de 6 millones de personas lo visitan cada año, especialmente en temporada. 

La mejor forma de evitar las interminables colas de entrada y no tener que esperar horas para ingresar, es comprando las entradas del Coliseo de forma online con anticipación. Incluso intentar comprar los tickets del coliseo para las primeras horas de la mañana. Sin embargo, si no quieres comprar las entradas de forma online, te recomiendo comprar la entrada en el Palatino, ya que suele haber menos gente y la entrada es combinada para ambos monumentos. Otra opción es comprar la tarjeta Roma Pass, una tarjeta de descuentos que ofrece entrada gratuita y sin colas para el Coliseo.

De todas formas, la mejor opción para visitar el Coliseo Romano es contratar un tour en español. No sólo te incluirá la entrada al Coliseo sino que además te dará el acceso prioritario, evitando las largas colas, y además podrás aprovechar al máximo tu experiencia ya que un guía te contará todo con lujo de detalles.

2. Qué ver en Roma: La Fontana di Trevi.

Qué ver en Roma

A lo largo de toda la ciudad de Roma vamos a encontrar un montón de fuentes, pero sin duda que la Fontana di Trevi es la fuente más monumental, emblemática y hermosas de la ciudad. Incluso algunos la llaman la fuente más bonita del mundo.

El nombre Trevi viene de la palabra Tre Vie que significa tres vías, precisamente porque la fuente se ubicaba en el encuentro de tres calles.

Algo que llama mucho la atención de la Fontana, y que sorprende de improvisto a más de un turista, es que a pesar de su ubicación en pleno centro romano, es casi imperceptible a su llegada, incluso estando a unos pocos metros de la plaza Trevi donde se ubica. Es casi como si intentara esconderse entre las callejuelas romanas. Sin embargo, una vez en frente a ella, se nota su belleza y tamaño monumental, generalmente atestada de personas.

Historia.

Era una antigua costumbre romana construir una hermosa fuente al final de los acueductos. El punto final del Aqua Virgo, uno de los antiguos acueductos que suministraban agua limpia a Roma, se situaba en el cruce de tres calles. Sin embargo, lo que había allí era un pequeña e insulsa fuente.

Fue el papa Clemente XII quien, en el año 1730, organizó un concurso para construir una fuente más digna. Fue entonces cuando Nicola Salvi, aún perdiendo el concurso, quien igualmente recibió el encargo.

Los trabajos de construcción empezaron en 1732 sin embargo, no estuvieron libres de inconvenientes. Distintas guerras, falta de presupuesto, peleas y muertes, hicieron que la construcción durara 30 años. Fue en el año 1762 que la Fontana de Trevi estuvo terminada. Mucho después de la muerte del papa Clemente XII, e incluso luego de la muerte del propio Nicola Salvi en 1751. El arquitecto que terminó la construcción fue Giovanni Pannini.

Detalles de la Fontana di Trevi.

Dada la magnitud de La Fontana de Trevi, 20 metros de ancho por 26 metros de alto, son varios los detalles que podemos observar en la fuente.

Qué ver en Roma

En principio, en el centro, se encuentra la gran estatua de Neptuno flanqueado por la estatua de la Abundancia, que porta una cesta cargada de fruta, y la Salubridad, la que vemos como una serpiente bebiendo de su copa. Por encima de las estatuas, se representa dos momentos de la construcción del acueducto. Del lado derecho se observa a la Virgen del agua señalandoles a un grupo de soldados por dónde brota el agua. Y del lado izquierdo, se ve al General Agripa dando instrucciones a sus subordinados para construir el acueducto.

También, en la fuente se puede ver como dos tritones guían caballos alados que arrastran la concha sobre la que viaja Neptuno. Cada caballo representa los momentos del océano, uno calmo y el otro turbulento.

Además, en lo más alto de la fuente se puede ver cuatro figuras esculpidas que representan las estaciones del año.

Tradición y leyenda de la Fontana di Trevi.

Existe una muy conocida leyenda de la Fontana di Trevi. Supuestamente si se lanza una moneda   de espaldas a la fuente, se cumple el deseo de volver a Roma. Incluso, si se lanza una segunda moneda, se encontrará el amor y se además resultará en matrimonio. Pero también, si se arroja una tercera moneda se cumple el deseo del divorcio. 

Algunos dicen que hay una forma apropiada de lanzar la moneda a la fuente. El procedimiento debe arrojar la moneda debe ser con la mano derecha y tiene que pasar sobre el hombro izquierdo.

Fontana de Trevi Ubicación.

La Fontana de Trevi se encuentra en pleno centro de Roma, en la Plaza Trevi, justo detrás del Palacio Poli. Para llegar a la plaza es necesario ir caminando ya que las calles donde se encuentra son bastantes estrechas, Via di S. Vincenzo, Vía Poli y Via Delle Muratte.

Qué ver en Roma

Trivia era una Diosa romana que protegía las calles de Trevi, la Vía De ‘Crocicchi, la Vía Poli y Vía Delle Muratte. De hecho, su estatua puede verse en el cruce de las calles.

En el caso de querer tomar el metro, la línea A tiene una estación llamada, Barberini Fontana di Trevi que está ubicada muy cerca de la Fontana.

La Fontana se encuentra la mayor parte del día repleta de turistas admirando su magnitud, intentando sacarse una fotografía, o arrojando la moneda al agua. Por este motivo, es recomendable pasar por lo menos una vez de día y otra por la noche tarde: momento en el que la fuente se encuentra muy bien iluminada y además con menos personas. También a primeras horas de la mañana es posible disfrutar de la Fontana de Trevi con menos turistas.

3. Qué ver en Roma: El panteón de Agripa.

Qué ver en Roma

El Panteón de Agripa, o Panteón de Roma, es un antiguo templo romano que se transformó en iglesia. Además, se dice que es el edificio mejor conservado de la antigua Roma.

Hoy, además de seguir siendo una iglesia con culto, el monumento cumple la función de panteón real. Contiene las tumbas de los dos primeros reyes de la Italia unificada (Vittorio Manuel II y Humberto I) y también la tumba del gran artista del renacimiento, Rafael.

En la actualidad, el panteón aún conserva su suelo original de mármoles y en las capillas interiores, donde antiguamente se encontraban las estatuas de las dioses, hoy se encuentran capillas con las tumbas de los reyes y numerosas obras de arte.

Pero lo que más sorprende del edificio, es su increíble arquitectura. Un edificio con una cúpula enorme, presidida por un hall al mejor estilo Griego, con una serie de inmensas columnas. Ya en el interior, luego de pasar por una puerta que no pasa desapercibida, el mármol del piso, junto a la impresionante cúpula con el óculo en el centro dejan a más de un turista boquiabierto.

Historia del Panteón.

El Panteón tal como lo vemos hoy se construyó entre los años 123 y 126 d.C, en tiempos del emperador Adriano. Éste nuevo edificio se construyó para reemplazar el antiguo panteón que existía en ese lugar pero que había sido destruido por un incendio.

Qué ver en Roma

El edificio en principio era dedicado al culto del conjunto de todos los dioses romanos, como su nombre indica Panteón, o en latín, Pan (Todos) Theos (dios).

De hecho, el nombre Panteón de Agripa se debe a que el antiguo edificio había sido construido por el general Marco Agripa en el año 27 a.C. Incluso, en la parte superior de la fachada edificio leerse M.AGRIPPA.l.F.COS.TERTIVM.FECIT, que significa ‘Marco Agripa, hijo de Lucio, cónsul por tercera vez, (lo) hizo’.

En el año 608 el emperador bizantino Focas lo ofreció el edificio del panteón al Papa Bonifacio IV. De este modo, el antiguo templo pagano romano se convirtió en la basílica de Santa María y los Mártires, dedicada a los mártires de las persecuciones.

Arquitectura del Panteón.

La parte frontal del edificio se muestra con ocho columnas en la fachada, seguida por dos hileras de 4 columnas cada una. Las 16 columnas son de estilo corintio de 13 metros de altura en granito gris y rosa.

Qué ver en Roma?

El interior del edificio tiene forma de cilindro cubierto por una semiesfera. La parte del cilindro tiene una altura igual a la semiesfera, por lo que la altura total del edificio es igual al diámetro conformando una esfera completa en el espacio interior. Tanto la altura del edificio como el diámetro de la cúpula es de 43,44 m.

En el centro de la cúpula se abre un óculo de 8,92 metros de diámetro que cumple una doble función, permite que la luz natural ilumine todo el edificio y por otro redistribuye las cargas arquitectónicas

Ya en el interior del Panteón se pueden ver los siete nichos seguidos de parejas de columnas. En el edificio se encuentran las tumbas de los pintores Rafael y Annibale Caracci, además del los reyes de italia, Rey Humberto y la reina Margarita; y Vittorio Emanuel II.

Ubicación del Panteón.

El Panteón se encuentra en la Plaza de la Rotonda donde también se puede ver una fuente y un obelisco en el centro. La plaza con el panteón se ubica muy cerca de la Fontana de Trevi, por lo que puede ser una buena combinación para ver en Roma.

En Metro, la estación Barberini Fontana di Trevi de la línea A es la opción más cercana. En autobús las líneas 30, 62, 64, 81, 87 y 492 nos acerca al Panteón, bajando en la parada Largo di Torre Argentina. Cualquiera sea la opción elegida, metro y bus hay que caminar siguiendo las indicaciones.

El Panteón es sin duda uno de los monumentos más hermosos y llamativos de Roma. Además tiene el plus que la entrada es gratuita. Siendo un edificio tan céntrico, es recomendable visitarlo más de una vez, de día y de noche para verlo iluminado.

Si tienes planes de visitar Roma, el post «Cómo moverse por Roma en transporte público. Aprende a usar el metro y el bus de Roma« te será de mucha utilidad.

4. Qué ver en Roma: Piazza Navona.

Qué ver en Roma?

Plaza Navona en Roma, o en italiano, Piazza Navona, es una de las plazas más bellas e importantes que ver en Roma.

La forma y dimensiones de la plaza se debe a que se ubica donde antiguamente existía el estadio romano Domiciano. Una arena de más de 270 metros de largo y aproximadamente 55 de ancho, construida alrededor del 86 d.C. y que podía acomodar hasta 33.000 personas. El estadio servía como espacio para juegos atléticos griegos.

A medida que el viejo estadio empezó a caer en ruinas, fue cuando comenzaron a construirse los primeros palacios. Sin embargo, hubo que esperar hasta el siglo XVII a que el Papa Inocencio X, miembro de la familia Pamphili, enviara a construir las fuentes y la iglesia de Santa Inés en Agona que le darían a la plaza el estilo barroco que se puede ver hoy.

Qué ver en Piazza Navona en Roma.

Además de disfrutar el ambiente con mucha vida, lleno de restaurantes, bares, artistas callejeros y mucha gente, el mayor atractivo de la Plaza Navona son las tres fuentes y la Iglesia Santa Inés en Agona.

Las Fuentes.

Fontana dei Quattro Fiumi: «Fuente de los Cuatro Ríos” es la fuente que se encuentra en el centro de la Plaza Navona, construida por Bernini en 1651. Las cuatro estatuas de la fuente representan a los cuatro ríos más importantes en ese tiempo: el Nilo, el Danubio, el Ganges y el Río de la Plata. En el centro se eleva un obelisco de 16 metros de altura que perteneció al Circo de Majencio, que fue encontrado en la Vía Apia

Fontana del Moro: Es la fuente que está situada en la parte sur de la plaza. Creada por Giacomo della Porta, con colaboraciones de Bernini quién le adicionó la estatua del moro, era inicialmente era conocida como como la «Fuente del Caracol». Las estatuas originales en realidad fueron trasladadas a la Galería Borghese y sustituidas por copias.

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Fontana del Nettuno: Al igual que la Fuente del Moro fue diseñada por Giacomo della Porta. La estatua central representa al Dios Neptuno luchando contra criaturas marinas, creando una situación de caos en la que los caballos salen corriendo y las nereidas se muestran tranquilas junto al Dios.

Iglesia Santa Inés de Agona: La construcción de la iglesia se inició en el año 1652 por iniciativa del papa Inocencio X, cuyo palacio familiar Pamphili se encontraba justo junto a la iglesia. De hecho, en principio debía ser una capilla familiar anexa a su residencia. Incluso se realizó una abertura en la iglesia para que la familia pudiera participar en los servicios religiosos desde su palacio. 

Sin dudas, las dimensiones de la Piazza Navona, sus tres hermosas fuentes, los palacios que la rodean y el ambiente con mucho movimiento y vida hacen de esta plaza una visita obligada. En época de Navidad, en la Plaza Navona se pueden encontrar un mercado navideño.

5. Qué ver en Roma: Castillo de Sant´Angelo.

Qué ver en Roma?

El Castillo de Sant’Angelo, o en italiano Castel Sant’Angelo, es un icono de la ciudad de Roma. Se encuentra ubicado a orillas del río Tíber justo a la altura del puente de Sant’Angelo, a poca distancia de la Ciudad del Vaticano.

El Castillo cuenta con cinco plantas a las que se accede a través de una rampa en espiral. En cada una de los diferentes niveles vamos a encontrar desde la cámara de las cenizas, celdas de la antigua presión, hasta las diferentes estancias que funcionaron como residencia Papal. Por último, en la planta superior se puede salir a una gran terraza desde la que se pueden ver la ciudad de Roma desde las alturas.

Historia del Castillo de Sant’Angelo

Castel Sant’Angelo fue construido en el año 123 d.C. inicialmente como mausoleo para el emperador Adriano y su familia. Sin embargo, Adriano murió en el 138 d.C., antes que Castillo estuviese terminado. En el año 403 perdió su función original y se convirtió en un bastión militar  unido a la muralla Aureliana para defender Roma.

Alrededor del 1277 Il Passetto, también conocido como Corredor de Borgo, fue construido por el papa Nicolás III. Fue el primer papa que trasladó la residencia desde el Palacio de Letrán, mal protegido, al Vaticano. Il Passetto era una especie de «corredor» de 800 metros de longitud que establecía una conexión rápida y segura entre la sede pontificia y el Castillo Sant’Angelo. Así quedaba garantizada la seguridad del Papa incluso en situaciones extremas, tales como asedios y guerras.

Siglos más tarde, en el XIV, después de varios cambios de propietarios entre las familias nobles romanas, el Castillo Sant’Angelo quedó a disposición de los papas.

En el siglo XIX, el Castillo Sant’Angelo pasó a ser de propiedad del estado italiano en 1870 como cuartel y prisión militar, función que desempeñó hasta 1901. Ya en el año 1925 se transformó en el Museo Nacional del Castel Sant’Angelo.

Nombre del Castillo.

Castel Sant´angelo

El mausoleo cambió su nombre a Castillo de Sant’Angelo en el año 590 d.C. En ese año, Roma sufría una terrible epidemia de peste. Para alejarla se organizó una procesión de la que también participó el Papa Gregorio I. Cuando la procesión pasaba por el mausoleo de Adriano, el Papa tuvo una visión del Arcángel Miguel envainando su espada.

La visión se interpretó como una señal del fin de la epidemia. Fue así que poco después de ese hecho la peste terminó y desde entonces los romanos comenzaron a llamar al mausoleo, Castel Sant’Angelo. En la cima del Castillo se puede ver la imagen de un ángel en el acto de envainar su espada.

Visitar el Castel Sant’Angelo.

El valor de la entrada general al 2019 es de 15€, y 7,5€ de jueves a domingos entrando a partir de las 19:30 hs. La entrada al Castel Sant’Angelo es gratis el primer domingo de cada mes. Los horarios de visita son de lunes a Miércoles de 9 de la mañana a 19:30 de la tarde y de Jueves a Domingos de 9 a 24 hs.

La forma más sencilla de llegar es con la línea A de metro en la estación Lepanto u Ottaviano-San Pietro. Mientras que los autobuses que tienen parada más cerca son las líneas 62, 23, 271, 982, 280 (parada Piazza Pia).

6. Qué ver era Roma: El trastevere.

Trastevere

Trastevere es sin duda uno de los barrios más bonitos y característicos de toda Roma. A lo largo  de sus calles adoquinadas, con sus casas llenas de colores, podemos disfrutar de un ambiente   bohemio y tranquilo. Repleto de trattorias romanas, bares, tiendas de recuerdos, talleres de artesanos es posible disfrutar de una atmósfera vibrante y llena de vida.

El nombre Trastevere proviene del latín y significa trans Tiberis, «Tras el Tíber”. De hecho, en la antigüedad el barrio del Trastevere fue inicialmente poblado por las clases sociales menos acomodadas de Roma y no era la zona mejor vista. Hoy en día las cosas son diferentes y el barrio es uno de los lugares más visitados de la ciudad. No sólo por su vida nocturna, sino también porque contiene monumentos, iglesias y lugares que ver en Roma.

Qué ver en el barrio del trastevere en Roma.

Mucha de la vida del Trastevere se concentra alrededor de la Piazza di Santa María in Trastevere donde se encuentra la Basílica de Santa María en Trastevere. Además, en el centro de la plaza, se puede ver una de la fuentes más antiguas de Roma.

Trastevere 2

Caminando por via della Paglia se llega a otro rincón con mucho movimiento, piazza di Sant’Egidio, sede del Museo de Roma en Trastevere. También en el barrio del Trastevere, recorriendo sus callejuelas se llega a la Iglesia de Santa Maria della Scala en honor a la Virgen y la Piazza San Calisto con sus tiendas y restaurantes en los alrededores.

Otra importante plaza es la Piazza Trilussa, ubicada de frente al Lungotevere Raffaello Sanzio en justo a la altura del Ponte Sisto. Aquí se pueden encontrar muchos turistas y locales, en un ambiente muy bohemio con músicos y artistas callejeros a cualquier hora del día.

Sin dudas que el barrio del Trastevere es ideal para la hora del aperitivo, tomar un aperol con algún tentempié en alguna de sus mesitas al aire libre es un obligado que hacer en Roma. Pero no solo eso, a la hora del almuerzo o cena se puede elegir uno de sus tantos bares y restaurantes típicos donde probar la mejor gastronomía italiana.

7. Qué ver en Roma: Campo dei Fiori.

El Campo dei Fiori, o en español Campo de flores, es una de las principales plazas de Roma, con mucho movimiento tanto de día, con su tradicional mercado, como durante la noche, cuando sus bares y terrazas se llenan de turistas y locales.

Una leyenda cuenta que el nombre de la plaza proviene del latín Campous Florae, o sea, Campo de Flora, una mujer amada por el general romano Pompeyo, que había construído su teatro cerca del mercado.

Historia de Campo dei Fiori.

Qué ver en Roma?

Antes del siglo XV no existía ninguna plaza y en su lugar se encontraba un campo de flores, por esa razón su nombre. En el año 1456, el Papa Calixto III, hizo arreglar todo el barrio y envió a empedrar toda la zona. Fue así que comenzaron a construirse muchos palacios en sus alrededores, entre los que se encuentra el palazzo Orsini, que da precisamente al mercado.

En 1858 se incrementó la extensión de la plaza con la demolición de algunas de las casas de la parte norte. Además se cambió de ubicación la fuente que se encontraba allí, que previamente estaba en el centro de la plaza.

Con el tiempo la plaza comenzó a tomar cierto grado de prosperidad y la zona se transformó en un centro de diversas actividades, tanto comerciales como culturales. De esta forma, Campo dei Fiori se convirtió cada vez más en un lugar de paso y en un importante punto de encuentro de la ciudad.

Desde el año 1869, que cada mañana, excepto el domingo, en la plaza se instala uno de los mercados tradicionales más antiguos de Roma. Caminando por sus coloridos puestos se puede ver todo tipo de productos gastronómicos, fruta, verdura, carnes, pasta, pescado, y obviamente flores.

Monumento a Giordano Bruno.

También la plaza Campo dei Fiori fue testigo de hechos no tan felices como castigos y ejecuciones capitales. La gran estatua en el centro de la plaza representa los eventos ocurridos el 17 de febrero de 1600. Ese día fue condenado a muerte y quemado vivo el filósofo el fraile dominico Giordano Bruno. Según se sabe fue acusado de herejía por la Iglesia por sus teorías revolucionarias sobre el universo.

El filósofo está orientado mirando hacia la Ciudad del Vaticano, aparentemente en señal de reprobación a la Iglesia. Será casualidad, pero Campo dei Fiori es la única plaza histórica de Roma que no tiene una iglesia.

Entonces durante el día se puede disfrutar en Campo dei Fiori el lado más tradicional de Roma,  recorriendo su mercado y su historia. Pero además, por la noche se puede volver a la plaza para disfrutar de la vida nocturna Romana en uno de los muchos bares, restaurantes o cafeterías al aire libre que se encuentran a su alrededor.

8. Qué ver en Roma: El Foro Romano y Monte Palatino.

Qué ver en Roma?

El Foro Romano era un enorme espacio donde se desarrollaba toda la vida ciudadana en la antigua Roma. Esta zona era el núcleo de la civilización romana, la política, el comercio, la justicia, la religión y la vida social pasaban por estas calles.

Por sobre el valle del Foro se levanta el Monte Palatino. En este lugar se encuentran las ruinas de la residencia imperial. El hogar para emperadores que Augusto comenzó a construir pero que fue desarrollada espectacularmente por sus sucesores.

Entonces, si se quiere conocer cómo era la vida de Roma en su esplendor, hay que visitar el Foro Romano y el Monte Palatino. Generalmente viene incluido con la visita al Coliseo Romano.

Historia del Foro Romano.

Al principio, el foro, era simplemente un mercado que se encontraba en la entrada de la ciudad y que no tenía demasiada importancia porque se lo consideraba alejado. Aunque a partir del siglo VIII a.C. comenzó a tomar una mayor relevancia, fue cuando se construyeron las cloacas que se lo integró definitivamente a la actividad de la ciudad.

Antes que el Foro se transformara en el centro de la vida del Imperio Romano, toda la zona era sector pantanoso. Fue en el siglo VI a.C. que se drenó todo el área mediante la Cloaca Máxima. Este hecho permitió que toda la zona se vuelva el centro de la vida pública de Roma.

Poco a poco se fueron construyendo las edificaciones más importantes que fueron dando forma al Foro Romano y su increíble arquitectura. Enormes templos, increíbles palacios, vastos mercados, grandes arcos y columnas talladas, todos se podían encontrar en este lugar.

Luego de varios siglos, el aumento de la población hizo que los emperadores debieran construir hacia el norte y le fue restando importancia. Además, en el siglo III el foro resultó muy dañado primero por un gran incendio, más tarde por culpa de los terremotos y finalmente por las invasiones barbáricas.

Ya en la Edad media, muchos de los edificios fueron transformados en iglesias y otros en fortalezas de los barones romanos. Pero más que nada deja de darse importancia a las construcciones y el terreno empieza a usarse para el pastoreo del ganado o como cantera de piedras de construcción.

Qué ver en el Foro Romano.

El foro Romano

El Foro es grande y se puede estar varias horas recorriendo todo. Son muchos los lugares y la información que ver pero a continuación resalto los más importantes:

Vía Sacra: Era la calle principal de la antigua Roma y tenía comunicación directa con la Plaza del Campidoglio  y con el Coliseo.

Arco de Tito: Es el arco del triunfo que conmemora la victoria de Roma sobre Jerusalén. Fue construido tras la muerte del emperador Tito.

Arco de Severo Séptimo: Es un arco construido en el año 203 d.C. para conmemorar el tercer aniversario de Severo Séptimo como emperador.

Templo de Antonino y Faustina: Construido en el siglo II, el templo de Antonino y Faustina. Es el templo mejor conservado del Foro Romano.

Basílica de Majencio y Constantino: El tamaño que se puede notar de los alto techos hace que sea uno de los lugares más impresionantes que ver del Foro en Roma. Además, da motivos para pensar que fue uno de los edificios más importantes del Foro Romano.

La Curia: Era el edificio donde reunía el Senado para tomar la mayoría de las decisiones del Imperio Romano.

Columna de Foca: Fue una de las últimas edificaciones originales del Foro además de ser una de las pocas que han permanecido en pie desde que fue erigida. Construida en el año 608 d.C. en honor al emperador de Bizancio.

Visitar el Foro Romano y Palatino.

El ticket de entrada es el mismo para el Coliseo, el Foro Romano y el Palatino, y tiene una validez de dos días. Da derecho a una entrada al Coliseo y una al Foro Romano con el Palatino que se puede utilizar en uno o dos días seguidos. El ticket para el Foro Romano se puede comprar en cualquiera de los monumentos (se aconseja las del Foro Romano y el Palatino para evitar las colas del Coliseo) o también comprar la entrada online.

También es posible ingresar al foro con la tarjeta de descuentos Roma OMNIA Pass.

Éste es un lugar altamente recomendable para visitarlo con un guía ya que es la mejor forma de disfrutar y aprender todo lo que se va a ver. Además con los tours se puede evitar las largas colas y esperas de acceso.

9. Qué ver en Roma: Piazza Venezia y Monumento a Vittorio Emanuele II.

Qué ver en Roma

La Piazza Venezia es una de las plazas más importantes que ver en Roma. Rodeada de edificios imponentes y llenos de historia es casi el centro de la ciudad. Su plazoleta central donde convergen cinco de las más importantes calles de la ciudad es el uno de los lugares más transitados de Roma.

La plaza adquiere el nombre de Venecia luego que el Cardenal Veneciano y futuro Papa, Pietro Barbo, enviara a construir su Palacio. Palacio que en algún momento tomaría la función de Embajada de la República de Venecia.

Qué ver en Plaza Venezia.

En la plaza podemos ver al lado oeste el Palazzo Venezia. Edificio que fue utilizado varias veces como residencia papal y también como embajada de la República de Venecia. En época de la segunda guerra mundial, Mussolini lo utilizó como su sede central. Hoy en día se encuentra el Museo del Palacio Venezia y el Museo nacional de arte. Además, al lado del Palacio Venezia también se encuentra el “Palazzetto Venezia”, reconstruido en 1882 donde hoy se pueden ver muestras de arte contemporáneo. 

Del lado opuesta de la plaza se encuentra el edificio de la Assicurazioni Generali, el cual tiene el mismo aspecto e imagen externa que el Palazzo Venecia. El edificio fue construido entre 1906 y 1911, en el momento de la reestructuración de la plaza. Del lado derecho del edificio se encuentra una placa conmemorativa que dice en ese lugar existía la casa donde vivió y murió Miguel Angel.

Piazza Venezia

En el lado norte de la plaza se puede observar el Palazzo Bonaparte con su característico balcón cerrado en el primer piso. El nombre del palacio se debe a que la madre Napoleón Bonaparte vivió y murió en ese edificio.

En el lado sur de la Piazza Venezia se encuentra el enorme Monumento nazionale a Vittorio  Emanuele II, Altare della Patria o Vittoriano. Es un monumento inaugurado en 1911 en honor al primer rey de la Italia unificada. Además, en el enorme edificio se puede ver la tumba del soldado desconocido con una llama eterna protegido constantemente por dos guardias.

Al Vittoriano se puede acceder y subir hasta una de sus terrazas gratis pero también se puede subir hasta la cima mediante un ascensor que se encuentra en la parte posterior. El costo es de 7€.

10. Qué ver en Roma: Mercado de Trajano.

Se dice que el Mercado de Trajano fue el primer centro comercial cubierto de la historia. El complejo se construyó entre los años 107 y 110 d.C. y estaba formado por seis plantas a lo largo de las cuales se distribuían más de 150 locales comerciales.

Fue construido por uno de los renombrados arquitectos de la época, Apolodoro de Damasco, que sirvió tanto al emperador Trajano como posteriormente al emperador Adriano.

El Foro de Trajano en realidad era todo un complejo arquitectónico que incluía una basílica, una biblioteca y un gran edificio de planta semicircular para el mercado, conocido hoy como Mercados de Trajano.

El mercado estaba constituido por seis niveles: los tres inferiores estaban destinados a tiendas que comerciaban productos del aceite, vino, pescados, frutas, verduras y otros alimentos. Los niveles superiores del mercado lo ocupaban oficinas y una biblioteca. El conjunto llegó a tener 150 tiendas.

Durante la Edad Media el complejo sufrió grandes transformaciones, añadiendo diversos pisos y elementos defensivos, como la Torre de las Milicias, construida en el año 1200. Posteriormente se agregó un convento, aunque fue demolido a principios del siglo XX.

Hoy en día el Mercado de Trajano está unificado con el Museo de los Foros imperiales, por lo que la visita es conjunta. Estos Museos están dedicados fundamentalmente a exposiciones sobre los Foros Imperiales: con reconstrucciones de cómo fueron en época clásica y durante la Edad Media, con maquetas, videos y paneles explicativos. También permiten recorrer el laberinto de estancias que forman los Mercados de Trajano, y la antigua Via Biberatica, que conserva el empedrado original y las estancias de tiendas y tabernas de época romana.

El valor de la entrada es de 9,5€. El único punto negativo es que la información de los paneles se encuentra solamente en italiano o en inglés.

11. Qué ver en Roma: La Plaza de España.

Qué ver en Roma

La Plaza de España es una de las plazas más famosas y conocidas de Roma. Su nombre (Piazza Spagna) se debe a la ubicación de la embajada española ante la Santa Sede en dicha plaza. Lo que más resalta de la Piazza di Spagna es su majestuosa escalinata de 135 peldaños que une la Fontana della Barcaccia con la Iglesias de Trinità dei monti en la cima.

Qué ver en la Plaza de España.

La escalera: La escalinata fue diseñada por los arquitectos Alessandro Specchi y Francesco de Sanctis y que el Papa Benedetto XIII inauguró en un año de Jubileo, 1725. La idea era conectar el palacio de la embajada española y la propia iglesia de Trinità dei Monti.

La fuente: En la parte inferior de la plaza se encuentra la Fontana della Barcaccia, una obra del padre de Bernini que emula a un barco naufragando. Según se dice inspirada por la llegada a la plaza de un barco en la inundación del Tíber en 1598.

Piazza di Spagna

La iglesia: En la cima de las escaleras se ubica la iglesia Trinità dei Monti la Monte Pinicio que en principio era de dominio Francés. De hecho, la escalera que unió a la Plaza de España se construyó con aportes de la corona Francesa como regalo de paz entre Francia y España. Sin embargo, lo que más destaca desde la cima son las vistas de la escalera con la ciudad de Roma de fondo.

Además, la Plaza de España, está muy bien conectada con otras zonas de la ciudad. Por la parte inferior de la escalinata pasa la Via del Babuino, calle que desemboca en la Piazza del Popolo, otro lugar qué ver en Roma. También, partiendo desde la Fontana della Barcaccio se puede caminar por la Via dei Condotti, célebre por sus lujosas tiendas de moda.

Desde la parte superior de las escaleras se puede llegar hasta la Villa Medici y visitar sus jardines o disfrutar de alguna de sus exposiciones. También, caminando un poco más llegamos hasta el hermoso parque de la Villa Borghese.

Justo debajo de Piazza di Spagna está la parada de metro A del mismo nombre, línea azul. En autobús, la línea 117 es otra posibilidad de transporte.

12. Qué ver en Roma: Villa Borghese.

Qué ver en Roma

La Villa Borghese es una gran parque en el centro de Roma y que se puede llegar muy fácilmente caminando desde la cima de la Piazza di Spagna.

El parque esta dividido en diferentes jardines con distintos detalles y estilos. El Giardino del lago, el Giardino Piazzale Scipione Borghese, Giardini Segreti, il Parco dei Daini y el Valle dei Platani.

Además de sus bellos jardines donde se pueden ver muchas esculturas, monumentos, fuentes y grandes lagos, también el parque contiene algunos otros puntos de interés. Entre los más importantes están, la Galería Borghese, con obras de grandes artistas como Rafael, Tiziano o Caravaggio, la Galería Nacional de Arte Moderno, el Silvano Toti Globe Theatre (copia del teatro Shakespeare’s Globe Theatre de Londres), el Zoo de Roma o el Reloj de Agua, que funciona desde el siglo XIX.

Qué ver en Roma

El parque fue originalmente un viñedo. Su transformación en un parque se inició en 1605 por el cardenal Scipione Borghese. Quería crear una villa con los jardines más grandes de Roma. Al final del siglo 18, se creó un lago con una isla que alberga un templo dedicado al dios de la curación. En el siglo XIX la ciudad de Roma compró el jardín a la familia Borghese y lo convirtió en un parque público en 1906.

La Villa Borghese es una muy buena opción para relajarse un poco, disfrutar de la naturaleza, quizás hacer un picnic, o tomarse un café en alguna de sus cafeterías escondidas entre sus jardines.

El parque tiene muchas entradas pero las más famosas y bonitas son las de la Piazza del Popolo, con una hermosa vista desde la cima del Inicio, o la entrada Flaminio que conecta con la famosa  y elegante Via Veneto.

13. Qué ver en Roma: Via Appia, Catacumbas de San Calixto y San Sebastián.

Qué ver en Roma

A lo largo de la Vía Appia, una de las antiguas arterias principales del imperio Romano que conectaba Roma con Brindisi, se encuentran varios lugares importantes que ver en Roma.

Se llama Via Appia porque fue enviada a construir por Appius Claudius Caecus en el año 312 a.C. En total, más de 530 kilómetros que llegaron a ser el nexo entre la capital italiana y Oriente. Esta calle, que algunos dicen fue la precursora de las modernas rutas, fue una de las importantes herramientas que permitió a los Romanos dominar el sur del Imperio, y conectar con el Mediterráneo oriental y Oriente Medio.

A lo largo de de la Via Appia podemos encontrar lugares de gran interés y con mucha historia, por ejemplo, la Iglesia del Quo Vadis, lugar donde Jesús se le apareció a San Pedro y lo hizo volver para afrontar su condena. Se dice que Jesús dejó sus huellas en ese lugar. Más adelante podemos encontrar tanto las Catacumbas de San Calixto como la Basílica de San Sebastián de las Catacumbas.

Basílica de San Sebastián de las Catacumbas.

Qué ver en Roma

La Basílica fue dedicada a San Sebastián, un mártir romano del siglo III venerado por no renunciar a su fe cristiana a costa de ser ejecutado. A la iglesia se la llama también ad catacumbas (de las Catacumbas) por las catacumbas de San Sebastián sobre las cuales fue construida.

Las catacumbas de 12 kilómetros de extensión en 4 niveles. En las catacumbas podemos ver distintos sarcófagos, algunos completos, otros rotos por el paso del tiempo hasta que finalmente  se desciende hasta llegar a la Cripta de San Sebastián.

Además de visitar las catacumbas, en la Basílica también se pueden ver otras reliquias como una piedra que tiene la impronta de los pies de Jesús, una de las flechas que mató a san Sebastián así como parte de la columna a la que estaba atado durante el suplicio. 

Las catacumbas de San Sebastián se pueden visitar de lunes a sábado de 9:00 a 12:00 y de 14:00 a 17:00 horas. El valor de la entrada es de 8€.

Catacumbas de San Calixto.

Las Catacumbas existen desde mitad del siglo II y reciben su nombre del Papa Calixto I quien era el administrador de este lugar. Con una red de galerías de más de 20 kilómetros de extensión y una profundidad de casi 20 metros, las catacumbas de San Calixto fueron el lugar de enterramiento de 16 pontífices y decenas de mártires cristianos.

Las catacumbas de San Calixto se pueden visitar de Lunes a Domingos de 9:00 a 12:00 y de 14:00 a 17:00 horas, a excepción de los miércoles. El valor de la entrada es de 8€.

Si te preguntas cómo llegar hasta las catacumbas, las líneas 118 y 218 llevan hasta San Calixto y San Sebastián. Además las línea 118 te permite recorrer gran parte de la Via Appia antica desde el bus.

14. Qué ver en Roma: Termas de Caracalla.

Las Termas de Caracalla son uno de los mayores complejos termales de la Antigüedad. Revestidas completamente en mármol y decoradas con magníficas obras de arte, las Termas de Caracalla fueron las más suntuosas que se construyeron en el pasado.

Porque en aquel entonces el pueblo romano no contaba con duchas privadas, así que iban a estos sitios a lavarse. Pero no sólo eso las termas para los romanos eran un lugar dedicado a cuidar el cuerpo y la mente. En las termas no sólo se usaban para bañarse, también practicaban deporte, hacían gimnasia y e incluso era un lugar de paseo, socialización y de estudio.

Las Termas de Caracalla eran capaz de albergar entre 1.500 y 1.600 personas y no había distinción alguna entre clases sociales o estatus. Se cobraba por la entrada y las mujeres pagaban el doble.

Hoy en día en las termas se pueden ver los restos de las inmensas bóvedas con sus enormes estructuras de más de 30 metros de altura permiten imaginar su esplendor original. Además, la planta del edificio se conserva íntegra y se pueden apreciar los bellos mosaicos.

Historia de las Termas de Caracalla.

El emperador Caracalla construyó las termas en el pequeño Aventino, en una área adyacente a la parte inicial de la Via Appia en el año 212 d.C. Para garantizar que llegase el agua y en abundancia, se construyó un ramal del acueducto del Acqua Marcia. Este ramal pasó a ser el tercer acueducto de la Antigua Roma con el nombre de Acqua Antoniana (nombre del emperador).

Desafortunadamente, tras la caída del Imperio Romano de Occidente y la guerra contra los bárbaros se cortó el funcionamiento de los acueductos. Por tanto, a partir del 537 d.C. las Termas de Caracalla dejaron de funcionar.

Después del cierre de las termas estas quedaron abandonadas durante mucho tiempo. De esta forma quedaron olvidadas y un terremoto en el año 847 terminó destruyendo parte de él. Tiempo después las termas pasaron a ser una cantera de materiales destinados a construir otros edificios.

Visitar las Termas de Caracalla.

Las termas se pueden visitar de Lunes a Sábados desde las 9 am. El valor de la entrada a las termas es de 8€. Ciudadanos de la UE entre 18 y 24 años pagan media entrada.

También existe la posibilidad de visitar las termas de Caracalla a través de una realidad virtual que realiza una comparación entre la realidad y una visión reconstruida de su esplendor en el s. III. 

15. Qué ver en Roma: La catedral de Roma San Juan de Letrán.

Qué ver en Roma

Aunque muchos confundan la Basílica de San Pablo en el Vaticano como la catedral de Roma, en realidad es la Santa Sede, la Catedral de Roma es la Archibasílica de San Juan de Letrán.

No solamente es la Catedral de la ciudad, además tiene el título de «Omnium urbis et orbis ecclesiarum mater et caput», madre y cabeza de todas las iglesias de la ciudad de Roma y de toda la tierra. Y si es poco, fue la primera iglesia que se construyó en Roma. 

Con semejante título, la Catedral de Roma no desilusiona. Esta inmensa Iglesia deslumbra con su belleza arquitectónica, las enormes estatuas, sus detalles dorados, los brillantes pisos de mármol y con toda su historia a cuestas. Incluso el Palacio Laterano, adosado a la basílica, fue residencia Papal antes de su traslado a Avignon, antes de ser destruido por un incendio en el año 1308. 

Basílica de San Giovanni in Leterano

La planta del templo consta de cinco naves, pero de todo lo que se ve al entrar, lo que primero llama la atención son las inmensas estatuas de los diferentes apóstoles. Estas se encuentran todo a lo largo de la nave central de 130 metros de largo. Sin embargo, eso no es lo único llamativo, las enormes puertas de bronce de la entrada son la antiguamente formaban parte del Senado del Foro Romano. Otra de las cosas que deslumbran la vista son el brillante piso de mármol con sus diferentes formas geométricas y todo el detalle dorado del techo.

En el exterior de la basílica podemos ver el obelisco de Letrán, el más alto de Roma. Su altura es de 31 metros, 45 si se suma la base y fue transportado aquí desde el Circo Máximo por el Papa Sixto V.

Visitar la Basílica de San Juan de Letrán.

La Basílica es conocida por varios nombres: la Archibasílica Papal del Santísimo Salvador del Mundo, y de los Santos Juan Bautista y Juan Evangelista en Letrán, también San Juan de Letrán o en italiano San Giovanni in Laterano.

Visitar la Basílica es una actividad gratuita en Roma. Sólo se paga entrada de 2€ si se quiere ingresar al Claustro. Además se puede comprar el audioguía en diferentes idiomas por 5€.

A la basílica se puede llegar con el metro línea A en la estación San Giovanni. También se puede llegar con las líneas de autobús 16, 81, 85, 87, 186, 650, 810 y 850.

La Scala Santa y el Sancta Sanctorum.

Enfrente de la basílica se encuentra la Escalera Santa, por la que Jesucristo subió para ser juzgado en Viernes Santo. La escalera fue traída desde el palacio de Poncio Pilato en Jerusalén en el año 326. Hoy esta escalera se compone de 28 escalones que se pueden recorrer sólo de rodillas.

En la cima de la la Escalera Santa, se puede ver a través  de una ventana protegida por un vidrio muy espeso y por una reja el interior de Sancta Sanctorum. Se trata de la Capilla privada de los Papas, considerada uno de los lugares más sagrados del mundo.

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