Los 10 mejores lugares que ver en Cracovia este 2024.

Plaza del Mercado Cracovia

Cracovia, una ciudad encantadora que enamora hasta la persona más reticente. La ciudad nos invita a perdernos en su casco antiguo, recorrer sus calles adoquinadas y disfrutar su plaza central al mismo tiempo que nos deleitamos con sus entretenidas leyendas de dragones, hermanos y trompetistas. Es casi imposible no quedarse deslumbrado por la belleza de esta ciudad. Hasta el mismísimo Hitler quedó maravillado e hizo todo lo posible para que Cracovia se mantuviese intacta. Además, Cracovia es una ciudad que la historia no le es indiferente. Aquí podemos tomar conciencia y aprender de los terribles acontecimientos de la historia. Sin dar más vueltas a continuación te dejo 10 lugares para ver y actividades, para hacer en Cracovia:

1. Qué ver en Cracovia: La plaza del mercado.

Qué hacer en Cracovia Polonia Europa

Como muchas ciudades de Europa, Cracovia también tiene su plaza central conocida como Plaza del Mercado o Rynek Główny. Sin embargo, no es cualquier plaza, es la plaza medieval más grande de Europa y una de las más bonitas también. No por nada, en 1978, la UNESCO declara al Rynek Główny y su casco histórico como Patrimonio de la Humanidad.

La plaza, que mide 40.000 m2 y tiene casi 800 años. Está dividida al medio por el edificio Sukiennice (lonja de los paños). Esta edificación de estilo renacentista era el antiguo mercado de las telas pero que en la actualidad está repleta de puestos de souvenirs.

A un lado del Sukiennice se encuentra la única parte sobreviviente del antiguo ayuntamiento de cracovia, una torre de 70 m Wieża Ratuszowa. La torre intenta hacerle competencia a la de Pisa en Italia, ya que se encuentra 55 cm desviada como resultado de una gran tormenta en 1703.

La Basílica y su trompetista.

Al otro lado de la plaza se destaca la basílica de Santa María con sus torres de altura desigual y protagonista de dos leyendas muy entretenidas. La de los hermanos que competían entre sí al construir las torres, y la del trompetista que muere intentando salvar la ciudad. De hecho, en la actualidad, todos los días y a todas horas en punto, desde la torre más alta de la basílica, un trompetista sale por la ventana e interpreta una melodía que se interrumpe de pronto. 

En el mismo lado de la plaza también podemos encontrar la pequeña pero bonita Iglesia de San Adalberto (data del siglo X), y el monumento al poeta Adam Mickiewicz, famoso por su poema Pan Tadeusz dedicado a una gran hazaña polaca.

Pero eso no es todo, la plaza está rodeada de restaurantes, cafés, negocios y puestos de flores. Decorada por una gran fila de carruajes tirados por caballos que acentúan el estilo medieval.

La combinación de todos estos factores hacen del Rynek Główny un plaza hermosa, con mucha vida y una atmósfera vibrante que nos invita a quedarnos disfrutando del ambiente durante horas.

2. Qué ver en Cracovia: Colina de Wawel.

Colina de Wavel Cracovia
Vista de la catedral de Wawel

Wawel es la colina que se encuentra a orillas del río Vístula muy cerca de la plaza del mercado. De hecho, forma parte del casco histórico de Cracovia declarado patrimonio de la humanidad. En la colina de 228 m de altura, y una historia de 1700 años, se ubican dos de los edificios históricos más importantes de Cracovia y de Polonia en general, la catedral de Wawel y el Castillo Real.

La catedral de Cracovia.

La Catedral, también llamada Catedral de San Wenceslao y San Estanislao, es una de las iglesias más importantes del país que ha sido testigo de grandes acontecimientos en Polonia. Coronaciones, entierros y grandes ceremonias se han sucedido en esta Catedral. 

En cuanto a lo arquitectónico, lo que más se destaca de la Iglesia gótica son las 18 capillas que se le han anexado a sus laterales. La que más se destaca es la Capilla de Segismundo con su estilo renacentista de base cuadrada y cúpula dorada. Tanto por el interior como por el exterior, la Catedral vale la pena recorrerla. La mezcla de estilos, formas y colores llama mucho la atención.

El Castillo Real.

El otro edificio importante de la colina es el Castillo Real. Su origen es del siglo XIV cuando el Rey Casimiro III el grande envió a construirlo. Desde entonces fue residencia de varios reyes de Polonia y gran centro de poder del Estado Polaco. Actualmente además de poder recorrer las diferentes salas del Castillo, también se puede visitar uno de los museos de arte más importante del país.

Luego de disfrutar la Catedral y el Castillo, la colina de Wawel tiene unos miradores muy lindos donde se puede tener unas muy buenas vistas del río Vístula. Y para los que gustan de las historias y leyendas, saliendo del castillo, por la puerta que da al río, se encuentra el dragón que echa fuego por su boca en alusión a la leyenda del Dragón de Wawel y el Rey Krak.

3. Qué ver en Cracovia: Recorrer el Stare Miasto.

Qué hacer en Polonia Europa

Stare Miastro se llama a la ciudad vieja o casco antiguo en Polaco. Es la zona que está delimitada por la antigua muralla de la ciudad que ahora se transformó en un largo parque llamado Planty. En el casco antiguo es donde se ubica la plaza del mercado y la colina de Wawel por lo que es una zona que se transita varias veces al visitar Cracovia.

Stare Miasto Cracovia
Casco histórico Stare Miasto

Pero el Stare Miastro no solo es la plaza y la colina. El casco antiguo está repleto de calles y edificios muy interesantes para ver y para visitar en Cracovia. En la puerta de Florian, la entrada norte a la ciudad, podemos encontrar la Barbacana, una antigua fortificación y último vestigio bien conservado de la muralla de la ciudad. Cruzando por la puerta nos encontramos con la calle Florianska que del otro lado de la plaza se llama Grodzka. Ésta es la antigua Milla Real que se conecta a la Catedral y que los antiguos reyes caminaban para ser coronados. Hoy en día, a lo largo de este camino encontraremos infinidad de tiendas, restaurantes, cafeterías, hoteles y lugares para comprar souvenir. 

Dentro del casco antiguo también podremos disfrutar de muchos otros atractivos de la ciudad como el colegio Maius, la Universidad Jagellónica, el Museo Czartoryski, el Museo nacional de Cracovia, el Museo bajo el Rynek, y muchos más. Realmente el casco antiguo es muy bonito para perderse por su calles y recorrerlo tanto de día como de noche. Es una zona donde hay mucho movimiento a toda hora y nos hace sentir estar caminando por una ciudad del medioevo.

4. Qué ver en Cracovia: Barbacana y Puerta de Florian.

La puerta de Florian Cracovia
Puerta de Florian

La barbacana es una antigua edificación militar defensiva de la edad media que se encontraba conectada a la muralla de la ciudad. En la actualidad es una de las últimas tres en su estilo que sobreviven en todo Europa, aunque la de Cracovia es la que mejor se conserva.

Ésta estructura militar cumplía la función de defender la Puerta de entrada y la muralla de los enemigos invasores. Por ese motivo su forma es circular y se encuentra rodeada por un foso. Fue construida con muros de casi 3 metros de espesor, siete torres, y muchas ventanas desde donde disparar flechas. Estaba conectada tanto a la muralla como a la puerta de Florian por un pasadizo cubierto. Hoy en día se puede visitar, recorrer su interior y disfrutar de alguna exposición del momento pagando 9PLN.

Justo en frente de la Barbacana se encuentra la Puerta de Florian. Ésta era la puerta más importante de las ocho puertas que existían en el siglo XV cuando la ciudad se encontraba amurallada y en la actualidad es la única que queda en pie. Esta entrada era la más animada en ese entonces, con gran movimiento de personas ya que quedaba a sólo 5 minutos a pie de la Plaza del Mercado, principal punto comercial de la época. Además era la puerta que daba comienzo al Camino Real hasta el castillo de Wawel. Cada Rey que fue coronado tenía que hacer este camino a pie.

La torre de 33,5 m de altura fue construida en el siglo XIV como protección ante los ataques turcos y estaba conectada a la barbacana mediante un puente que cruzaba el foso. Se la nombró St. Florian en alusión al santo patrono de la ciudad de Cracovia. En el interior de la puerta, hay una pequeña capilla a nombre de la familia Czartoryzki (importante familia real polaca).

5. Qué ver en Cracovia: Visitar el Collegium Maius.

Collegium Maius
Reloj Collegium Maius

El Collegium Maius de Cracovia es el edificio más antiguo de la Universidad Jagellónica, la más importante de Polonia. Fue inaugurado en siglo XV por orden de Casimiro III, lo que la hace la segunda más antigua de Europa central. Entre los alumnos más destacados del Collegium se encuentran Nicolas Copérnico y el Papa Juan Pablo II (Karol Wojtyla).

El edificio es muy bonito, en estilo gótico, con un patio interior que destaca por sus galerías con arcadas. En particular, cada 2 horas a partir de las 9am, un reloj muy interesante da la hora mediante un espectáculo. Un serie de muñecos de madera, que representan figuras importantes el colegio, desfilan por debajo del reloj acompañados por el himno universitario “Gaudeamus Igitur”.

Además, el Collegium Maius cuenta con exposiciones de instrumentos científicos de de varios siglos atrás, colecciones de pinturas del siglo XV y esculturas de la edad media. También se pueden visitar varias de las salas del Collegium como el Salón de Asambleas, la Sala Copérnico o el Stuba communis (antiguo refectorio). 

Ingresar al patio y ver el reloj es gratis, pero si queremos ver la salas y las exposiciones, el valor de la entrada es de 12PLN a 16PLN para adultos dependiendo que se quiera ver.

Después de disfrutar del patio y presenciar el show del reloj, podemos tomar un café con algún pastelería en la antigua cafetería del Collegium. En una de las partes más antiguas del edificio se encuentra una cafetería muy bonita que llama la atención por encontrarse en el sótano. Con sus paredes de ladrillos nos hacen sentir estar en la edad media compartiendo un café con el joven Copérnico o Karol Wojtyla.

6. Qué ver en Cracovia: Darse un respiro y pasear por el Planty.

Qué hacer en Cracovia Polonia Europa

El Planty (plantación) es el parque que rodea al casco antiguo y donde antiguamente se encontraba la muralla que protegía a la ciudad. El parque es una combinación de 30 jardines de varios estilos, un espacio verde de casi 21 hectáreas con una longitud de 4 kilómetros que lo convierte en uno de los principales pulmones de la ciudad. 

En el siglo XIX, debido al crecimiento de la ciudad de Cracovia, se decidió derribar las murallas para crear un espacio de naturaleza que con el paso del tiempo fue transformándose. En principio con plantaciones de árboles, luego incorporando puentes, más adelante marcando los senderos y finalmente agregando bancos, monumentos y fuentes, el planty se convirtió en un muy bonito cinturón verde de la ciudad.

El Planty invita a dar un paseo por sus caminos, relajarse un poco de los ajetreados ruidos del centro y recargar energías para seguir recorriendo la ciudad.

7. Qué ver en Cracovia: Probar la comida Polaca en un bar de leche.

Para conocer realmente cada país o ciudad que visitemos, no puede faltar entre las actividades para hacer, comer su comida tradicional. Cracovia no es la excepción y por eso es recomendable ir por lo menos a comer, y barato, a los bar de leche que hay en la ciudad.

Bar de leche Cracovia
La simpleza del Bar de leche

Los bar de leche (Bar mleczny) son pequeños comedores que venden comida tradicional de Polonia a precios económicos. Estos bares fueron promulgados por el gobierno socialista en el período de entreguerras para acercarles a los obreros un lugar para comer barato. El nombre de bar de leche proviene de los primeros menús que se ofrecían basados en productos lácteos mayormente, verduras sopas y pasta. 

Yo recomiendo el Pod Filarkami bar mleczny ubicado en Starowiślna 29, 31-038 Kraków esquina con la avenida Dietla. Eso sí, es muy poco probable que los atiendan en inglés.

Entre los platos típicos para probar son Zurek, Zupa pomidorowa, Pierogi z mięsem, Pierogi ruskie, Schab ze sliwkami, Bigo, etc.

8. Qué ver en Cracovia: Degustar el famoso y tradicional Obwarzanki.

Obwarzanki
Puesto certificado Obwarzanki

Si hay algo que no nos podemos perder en nuestra visita a Cracovia, y además muy fácil de conseguir, es probar el pan Obwarzanki. Es lo más típico de la gastronomía de Cracovia. 

El obwarzanki es un pan tradicional en forma de rosca, generalmente espolvoreado con semillas de amapola, sésamo o simplemente sal gruesa. Es una delicia que hay que probar y que solo se consigue el verdadero en ésta ciudad. Solo hay que acercarse a uno de los cientos de puestos callejeros que se encuentran por todo Cracovia.

Pero no es simplemente un pan, es EL PAN de Cracovia, que en principio solo eran horneados durante la cuaresma. Tiene una historia de más de 600 años y desde la edad media se mantiene la tradicional receta que se ha heredado de panadero a panadero. 

En el siglo XIII se creó el gremio de los panaderos en Cracovia. En aquel momento, los obwarzanki solo podían ser horneados dentro de las murallas de la ciudad. Solo a ciertos panaderos específicos se les permitía vender los panes en los puestos de panadería alrededor del Sukiennice. La producción y venta del obwarzanki era controlada meticulosamente por el gremio en ese entonces pero a partir de mediados del siglo XIX se permitió que cualquier panadero pueda hacerlos.

Un pan certificado.

Desde el año 2010, el obwarzanki fue premiado con el Protected Geographical Indication (PGI), lo que significa que la Comisión Europea reconoció que este pan tan particular es parte del patrimonio culinario de Cracovia y de la tradición de la ciudad. El certificado determina estrictamente el peso, la forma (El producto original debe tener un diámetro de 12-17 cm, espesor de tejido de 2-4 cm y el peso de 80-120 gramos) y el proceso de producción del obwarzanki, y solo puede entregarse a los panaderos de la ciudad de Cracovia. Así de importante es el obwarzanki para los Cracovianos que hasta tiene su propio museo Zywe Muzeum obwarzanki. 

Entonces, después de todo esto, estamos más que convencidos que es un deber moral probar el obwarzanki. Solo hay que acercarse a uno de los cientos de puestos callejeros que se encuentran por toda la ciudad.

9. Qué ver en Cracovia: Barrio judío o Kazimierz.

El Barrio judío es una de las zonas más interesantes para conocer en Cracovia. Se lo llama Kazimierz porque en el siglo XIV el rey Casimiro III fundó el actual barrio judío como una ciudad diferente. Sin embargo, con el tiempo, se terminó anexando a Cracovia transformándose en un barrio más.

Con el correr de los años Kazimierz llegó a tener casi 4000 habitantes. Judíos de todas partes venían a vivir a la entonces ciudad. Sin embargo, durante la segunda guerra mundial, este barrio fue uno de los más afectados ya que toda su comunidad fue trasladada al gueto Podgorze en otra parte de la ciudad. 

Finalizada la guerra, el barrio quedó en un estado de decadencia total. Luego de varias décadas, a fines del siglo XX, la zona comenzó un proceso de restauración y revalorización. La famosa película “La lista de Schindler” terminó de alentar la recuperación del barrio (aunque la película evoca el gueto, en realidad se filmó en el barrio judío) transformándolo nuevamente en un lugar con muchos habitantes. 

En Kazimierz se pueden visitar varias antiguas sinagogas como la Sinagoga Alta, la Sinagoga vieja, Remuh, Principal, Isaac, Popper, Cupa y la más importante, que ahora es el Museo del Judaísmo, la Sinagoga Antigua del siglo XV. Además se puede visitar la plaza Nowy donde funciona un mercado muy pintoresco con muchos lugares para comer barato.

Hoy en día es una zona con mucho movimiento y vida nocturna, donde se puede disfrutar de muchas cafeterías, restaurantes y algunos conciertos. Es bastante frecuentado por gente local, estudiantes y turistas. Actualmente el barrio judío es uno de los lugares de moda y de los más elegidos para vivir, donde se puede encontrar mucho entretenimiento.

10. Qué ver en Cracovia: Antiguo Gueto y Fábrica de Schindler.

Polonia, y en particular Cracovia, es uno de los lugares más interesantes que ver para poder entender un poco más los trágicos acontecimientos de la segunda guerra mundial. Es conocido que el estallido de la guerra fue cuando Alemania invade el país polaco, por lo tanto, en Cracovia vamos a encontrar mucha información al respecto y de primera mano. Dos de los lugares más icónicos son el antiguo Gueto Podgorze y la famosa Fábrica de Schindler.

Podgorze fue un gueto creado en 1941 por el régimen Nazi para sacar a todos los judíos del centro de la ciudad y juntarlos en un reducido espacio privados de todos sus derechos. En este barrio vamos a encontrar varios lugares muy interesantes para aprender de la historia y concientizarnos sobre las aberraciones que se sucedieron. Entre los puntos interesante a conocer son, los restos del muro que contenía al gueto (calles Lwowska 25 y en Limanowskiego 62), la plaza principal Bohaterów, donde cerca de 17000 judíos esperaron para ser clasificados y transportados a los campos de concentración. En la misma plaza podemos observar el monumento de la sillas del cineasta Roman Polanski dedicado a los judíos que tuvieron que dejar sus casas.

También se encuentra la Farmacia del Águila protagonista de una particular historia. Cuando se creó el gueto se obligó a todos los polacos a marcharse de ese lugar. Sin embargo, un farmacéutico llamado Tadeus Packiewicz decidió quedarse con todo lo que ello involucraba, y ayudar a los judíos con comida, remedios, e inclusive hasta logró salvar a muchos.

La fábrica de Schindler.

Muy cerca del gueto se encuentra la famosa Fábrica de Schindler con otra interesante historia. El empresario Alemán (que en principio era un espía Nazi), aprovechando la mano de obra «gratis» del gueto judío, instaló su fábrica de esmaltados en Cracovia. Sin embargo, la fábrica sirvió como herramienta para resguardar a muchos judíos de la persecución Nazi. Incluso consiguió salvar la vida de muchos de ellos incluyéndolos en la lista de empleados no judíos.

La Fábrica y las acciones de Oskar Schindler fueron mayormente conocidas gracias a la película de Steven Spielberg “La lista de Schindler”. Hoy en día la fábrica es el Museo del holocausto donde el foco principal no es el propio Schindler sino los terribles hechos que sucedieron durante el holocausto y mayormente orientado al pueblo Polaco. Realmente es muy interesante.

Extra bonus de actividades qué ver en Cracovia.

11. Reflexionar visitando el campo de concentración Auschwitz-Birkeu.

Auschwitz Polonia Europa
Anil Ozturk en Pixabay

El campo de concentración de Auschwitz-Birkeu fue el más terrible de todos los establecimientos de esta clase. Se estima que más de un millón de personas murieron en este lugar. No solamente Judíos, sino también polacos no judíos, gitanos, homosexuales y prisioneros de guerra.

El Campo de concentración se ubica a unos 45 km de Cracovia, cerca de la ciudad de Oswiecim. Está conformado por diferentes sectores, Auschwitz I, Auschwitz II-Birkeu y Auschwitz III-Monowitz. En la excursión se visitan los primeros dos y las visitas son de aproximadamente 90 minutos cada una.

Es verdad que una excursión de esta envergadura no es para todos igual, algunos pueden estar más preparados que otros, los puede afectar más o menos, pero lo que sí es seguro, es sumamente interesante. Nunca lograremos entender del todo lo vivido en ese lugar pero es una gran oportunidad para concienciarnos de todo lo que no debemos volver a repetir.

Es posible visitar el campo de concentración de forma particular, ya sea en auto, o en transporte público. El autobús parte desde la estación central de Cracovia, y en tren es posible ir hasta Oswiecim y luego si tomar un autobús. 

12. Minas de sal de Wieliczka.

Las minas de sal de Wieliczka es otra de las excursiones muy recomendadas partiendo desde Cracovia. Éste punto turístico es uno de los más visitados en Polonia con más de 800.000 visitantes por año y fueron declaradas Patrimonio de la humanidad por la UNESCO en 1978.

Las minas han sido explotadas desde el siglo XIII hasta la actualidad, lo que las convierte en la segunda mina de sal más antigua del mundo en actividad (la primera también está en Polonia). Hoy en día sigue produciendo sal de mesa.

Wieliczka tiene una longitud de más de 300 Km y una profundidad de hasta 327 m. El recorrido turístico es de 3,5 km pasando por 22 capillas hasta llegar a la más impresionante, St. Kinga. A lo largo del recorrido se encontrarán lagos subterráneos, esculturas y objetos hechos de sal, como la última cena de Leonardo da Vinci o las impresionantes arañas de luz. También veremos antiguas máquinas y herramientas utilizadas por los mineros.

Las minas se encuentran a 15 km de la ciudad por lo que se puede contratar la excursión desde Cracovia. También se puede llegar en autobús desde la Galería Krakowska o en tren desde la estación central.

Es recomendable llevar abrigo porque en las profundidades la temperatura puede llegar a los -15º C. También calzado cómodo porque hay que caminar 3,5 y pasar por varias escaleras.

13. Iglesia Santa María.

La Iglesia Santa María que se encuentra en la Plaza del Mercado se puede subir a su torre más alta de 82 m. Se tiene una bonitas vistas de la plaza y el Sukiennice. Además que se puede ver la sala del trompetista de Cracovia.

14. La torre del antiguo ayuntamiento de Cracovia.

También se pueden obtener unas buenas vistas de la Plaza subiendo a la torre del ayuntamiento de 70 m de altura y 110 escalones.

En el primer piso se encuentra una oficina de turismo. Subiendo al segundo encontramos el museo de Cracovia con fotografías de la plaza. En los pisos siguientes se puede ver la maquinaria del reloj. Finalmente, llegando a la cima hay unas pequeñas ventanas donde se puede ver la ciudad de Cracovia.

En el sótano actualmente funciona una cafetería y un teatro, aunque en el pasado existían unas mazmorras donde se torturaba a los prisioneros.

Dónde dormir? ¿Dónde alojarse en Cracovia?

Stare Miasto.

Es el casco antiguo de la ciudad, declarado Patrimonio de la Humanidad y, por lo tanto, donde se encuentran la mayoría de los atractivos turísticos. Además sus calles están repletas de comercios, restaurantes, bares y cafeterías donde puedes saborear los platos locales.

La oferta de hoteles es muy amplia sin embargo, como es una zona céntrica, los precios son más caros que en otras partes de la ciudad.

Kleparz.

Este barrio de Kleparz se ubica al norte de Stare Miasto, justo donde comienza Royal Road, muy cerca de la plaza del Mercado o Rynek. En este lugar, al estar muy cerca del centro histórico, abundan los comercios, bares y restaurantes.

Alojarse en Kleparz permite estar cerca del centro pero a la vez disfrutar de un poco más tranquilidad. Cuenta con una buena oferta de alojamientos, cuyos precios son bastante más económicos que en otros barrios cracovianos más céntricos.

Podgorze.

Este barrio se encuentra situado al otro lado del río Vístula pero aún así está cerca de muchos de los puntos turísticos relacionados con la segunda guerra. La plaza Bohaterów o de los Héroes, la farmacia del Águila y a fábrica de Oskar Schindler se encuentran en Podgorze. La oferta de hoteles no es muy amplia y los precios son aún un poco elevados si los comparamos con otros distritos.

Kazimierz.

Kazimierz es un barrio tranquilo y bohemio, muy recomendable a la hora de elegir un alojamiento para dormir en Cracovia.

Ubicado al sur de Stare Miasto, este barrio era donde antiguamente vivía la comunidad hebrea. Durante la II Guerra Mundial fueron confinados al gueto de Podgórze, al otro lado del río Vístula.

Sin embargo, luego de un programa estatal de renovación y recuperación del barrio, Kazimierz volvió a tener mucha vida. Se destaca por su oferta de comercios, galerías de arte, anticuarios, bares, coctelerías e incluso tiene una plaza con food trucks.

La oferta de hospedajes es también muy amplia y variada. Aquí se puede encontrar alojamiento para todos lo presupuestos. Mi hospedaje al visitar Cracovia es Aparthotel Miodowa, muy lindo, con desayuno y bien ubicado.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio